Casas Rurales Románticas con Spa

Nuestras casas rurales con encanto están situadas en un entorno privilegiado del corazón de la Sierra de Gredos, Ávila.

Los Sitios de Aravalle comenzamos nuestra andadura en el año 1995 siendo pioneros del turismo romántico para parejas tanto en el Aravalle como en la Sierra de Gredos.

Creadores de un modelo original de casa rural diseñado y pensado para escapadas en pareja, con una personalidad única. La experiencia y el buen hacer de todo este tiempo, nos concede una idiosincrasia que constituye nuestro hecho diferencial.

Más de veinticinco años de servicio a nuestros clientes, de continua innovación y mejora de prestaciones, nos avalan.

Todas nuestras casas están diseñadas y equipadas para que disfrutéis de una escapada romántica en pareja en un lugar exclusivo rodeados de naturaleza.

Podréis añadir servicios complementarios en la casa rural con spa para no tener que preocuparos de nada, excepto de pasar unos días inolvidables de encuentro. En todas las casas se admiten mascotas.

Calma, desconexión, tranquilidad, reposo, relajo, intimidad, disfrute… en una casa rural de la Sierra de Gredos, en una casa rural romántica, en una casa rural con encanto.

Os ofrecemos cinco casas para dos personas con jacuzzi privado integrado en cada una de ellas. La Plazuela y El Balconcillo, en Hustias. El Naturalista y El Colirrojo en Casas del Abad. Y Ensueño, en Gilgarcía. Cuatro de ellas, además, cuentan con sauna, y dos con patio privado y barbacoa.

Si buscáis un lugar especial para compartir momentos inolvidables en la Sierra de Gredos, Ávila, ¡no dudéis en visitarnos!

Situados en la vertiente noroccidental de Gredos, en la comarca del Aravalle, aquí se encuentran las tres provincias, Ávila, Salamanca y Cáceres. Estamos junto al Valle del Jerte, cerca de Béjar y el precioso pueblo de Candelario..

Campo y montañas, robles, alisos, castaños, saúcos, en primavera, la espectacular floración de los piornos. Ríos donde refrescarse, y un clima que permite dormir todo el año sin sufrir noches sofocantes, y disfrutar del frescor de la sombra de los árboles.